viernes, 22 de agosto de 2014

César Tort recibe homenaje en el Conservatorio Nacional de Música

El Mtro. César Tort recibiendo un
reconocimiento de manos del
Dr. David Rodríguez de la Peña,
director del CNM.
En el marco de los festejos por el 40 Aniversario de la fundación del Instituto Artene, el Conservatorio Nacional de Música rindió un homenaje al músico, compositor y didacta César Tort, el pasado 21 de mayo de 2014. El Dr. David Rodríguez de la Peña, director de la Institución Académica, dio la bienvenida al maestro César Tort, a quien se refirió “como uno de los educadores musicales más importantes de nuestro país”. Además, dijo sentirse emocionado al reencontrarlo, porque él fue su primer maestro de música cuando tenía 5 años de edad y estudiaba en el Conservatorio.

El Maestro César Tort dictó una Conferencia Magistral en el Sala 4 del recinto donde habló de la gran importancia de la educación musical infantil, sus experiencias como educador en el Conservatorio, de los orígenes del Método Tort y del Instituto Artene. En el pódium lo acompañaron el Mtro. Manuel Rosillo Segura, ―discípulo del maestro Tort cuando realizaba sus investigaciones en el Conservatorio Nacional de Música y quien lo animó a dedicarse a la docencia―, y el Mtro. Eduardo Robles ―quien posteriormente fungió como maestro de ceremonias del concierto―.

Recordó que en los años 60’s entró como docente casi simultáneamente en el Conservatorio Nacional de Música y en la Escuela Nacional de Música, instituciones que le permitieron contar con varios grupos de niños con los que comenzó a aplicar sus procedimientos sobre educación musical y realizar sus investigaciones; esos son los orígenes académicos del Método Tort.

Un punto sustancial que lo llevó a crear el Método, fue el darse cuenta como los países europeos siempre han sentido un gran respeto por la música como factor educativo. “En toda Europa la educación musical es obligatoria, cosa que no sucede en México”, dijo.

Foto: Gabriela Casas
Para abundar al respecto, afirmó que México es uno de los países de América Latina que tiene uno de los folclores más importantes, y se debe en gran parte a la naturaleza musical del pueblo mexicano. Desde los primeros años, sus trabajos en educación musical para niños se basaron en el folclor nacional. En la música de Tort hay elementos de la cultura nacional para entregárselos al niño. “El niño, se va familiarizado con el folclor nacional. La música popular de México influye enormemente en el niño. Tomar los elementos de nuestra cultura popular y transmitirlos, no sólo es un deber sino que es muy ventajoso para la tarea de educación musical. Sin embargo, tanto en México, como en muchos otros países de Latinoamérica, aún nos falta mucho para entender el rango que debe de tener la música en el mundo escolar”.
La música debe estar en el enorme y diverso  mundo escolar de México, y sus trabajos se han enfocado a lo largo de cinco décadas con la certeza de que el niño necesita en su educación básica la formación musical. “Así como el niño aprende matemáticas, lengua materna, historia, geografía, que son importantes para su formación, así lo es la música y tiene el mismo nivel de importancia”; aseveró.
Recordó el Mtro. Tort que en sus primeros años en el Conservatorio Nacional de Música, usaba instrumentos de nuestro folclor para impartir educación musical a los niños, como por ejemplo, el arpa jarocha, que es un arpa diatónica, la cual está en el folclor como también la marimba. “Artesanos nacionales nos hicieron los instrumentos para esta tarea. No crean que me empeño en esto porque soy muy nacionalista, nada de eso. Estoy hablando de que un país como México, que tiene millones de niños, (hay más niños en México que gente en Centroamérica y el Caribe), por tanto, no los podemos educar con materiales costosos y traídos del extranjero; no tiene sentido. La sabiduría está en nuestro país, y hemos hecho que estos artesanos nos hagan timbales, arpas, metalófonos, xilófonos, entre otros, de bajo costo y con amplias posibilidades didácticas,que son los instrumentos más complejos que emplean los niños”.
El Método Tort crea coros y orquestas de percusiones, esto es por que la orquesta rodea al niño de timbres que llega a conocer a fondo. En este sentido César Tort señala: “La orquesta amplía el campo de la educación musical. Los coros y orquestas tienen que estar presentes en todas las aulas de México, no juntar a un grupo de niños, seleccionar a unos cuantos que tienen buena voz, hacer un pequeño coro y decir que una escuela está muy musicalizada porque tiene coro, no, el coro es una minoría, ¿y los demás niños qué? Yo estoy hablando del trabajo de aula con el recurso de una orquesta de percusiones bien organizada, con un coro a una voz o a varias voces. Tenemos amplísimos recursos para que a través de los años se haga una buena tarea en educación musical”.
Por cuatro décadas en el Instituto Artene se ha impartido el Método Tort, cuyo objetivo primordial es musicalizar a la niñez mexicana, “no sólo es acercar al niño a la música y que así descubra su vocación musical; también se han dado casos en que el niño descubre su vocación, pero ese no es nuestro propósito es una consecuencia. Nuestro propósito es musicalizar a todos los niños. Es por ello, que Artene recibe a todo tipo de niños, no hay selección, no importa que nos digan que son desentonados, retraídos o muy juguetones, no importa, la música debe de llegar a todos, lo que queremos es tener un mundo escolar, y en el mundo escolar no se admiten a los niños por pruebas musicales. Nos esforzamos por darles a los niños algo que sienten, algo que es suyo: la música de su país”; apuntó.
Tort también habló de los beneficios de la música en el niño: “Un adulto que recibió educación musical de niño está mejor organizado para entender muchas cosas, para asimilar unas y para rechazar otras, por ejemplo, no sólo se vuelve más exigente frente a su entorno sonoro sino también frente a su entorno cultural, lo entiende mejor. Un ser humano musicalizado entiende mejor el arte en general, su comportamiento es distinto y llega a distinguir mejor los elementos de su cultura. La música hace más amigables a la personas, su comunicación es más amplia y esto se ve después cuando llegan a ser adultos. Hemos encuestado a exalumnos de Artene a lo largo de estos 40 años, muchos ya casados y con hijos. De la multitud de preguntas que les hacemos hay muchas que coinciden, por ejemplo, muchos no tocan ningún instrumento pero gustan de la buena música. Algunos se han metido a coros, otros aprendieron a tocar algún instrumento porque gustaban de cantar con sus amigos, en fin: la música se vuelve su compañera”.

El Concierto
Foto: Producciones Alarid.

Más tarde, se realizó el Concierto en el Auditorio Silvestre Revueltas, con la participación de los “Niños Músicos de Artene y los “Jóvenes Exalumnos de Artene”, teniendo como Coros invitados a los “Niños y Jóvenes del Conservatorio Nacional de Música” y de la “Schola Cantorum”.

Interpretaron las siguientes piezas compuestas por el Mtro. César Tort: Amo a to, Toccata, Conjunciones, El lago y la tuna, El bosque indiano, El pequeño huasteco, La voz del huéhuetl, La ira del cardo y Pasos; bajo la dirección de los maestros: Itzaind Jiménez, Héctor Villalobos y Genoveva Tort.

Foto: Gabriela Casas
El Mtro. César Tort señaló en la conferencia que en las piezas se utilizan instrumentos de origen precolombino y otras piezas están inspiradas en el folclor nacional, como La ira del cardo, que está inspirada en una leyenda náhuatl muy vieja que “habla de una flor muy bella, blanca, delicada, traslúcida al sol que está protegida y rodeada por un cardo con espinas muy grandes. La flor crece casi a un nivel inaccesible donde empieza el bosque y termina la nieve, según la poesía, la flor se fue hasta allá porque quería protegerse, y los cardos que la rodean son sus defensas. La pueden oler, la pueden mirar, pero no intenten tocarla, porque entonces sus guardines, los cardos, van a actuar. Como ven esta es una leyenda, una tradición antigua y está presente en los cantos de los niños”, concluyó.

También se interpretó la pieza Coatl, inspirada en el mito precolombino de la serpiente emplumada, autoría de José Covarrubias Salles, querido maestro del Instituto Artene, a quien se le rindió un homenaje póstumo en el evento. W


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